En el fondo del mar se encuentra la despensa de la cosmética marina. Las sales marinas aportan beneficios así como también algas, el lodo, el fango y el colágeno marino.
De allí el origen de un tratamiento rejuvenecedor para las manos a base de sales marinas y colageno marino. Este ultimo ingrediente es utilizado por muchas casas de cosméticos en la elaboración de cremas faciales antiarrugas, porque estimula el revestimiento cutaneo.
El tratamiento, llamado Jessana consta de tres pasos:
- Jabón ionizado: Se remoja las manos en agua con sales marinas y fragancia de te.
- Acondicionador de cutícula: Intensiva sesión a base de aloe vera y vitamina E, ingredientes que favorecen el crecimiento de las uñas.
- Gel de colágeno marino: Ayuda a mejorar la firmeza y elasticidad de la piel de las manos, restaurando su tersura y protegiéndola de los efectos de los radicales libres
Esto hace que tus manos luzcan suaves y con brillo de seda, aportando esa luminosidad propia de la juventud.