El maquillaje antiaging es una forma de usar los productos en función de disimular y embellecer a las mujeres. Constituyen una serie de técnicas y métodos de cómo aplicar la base, el corrector, el colorete, el delineador, pintalabios, etc. El objetivo es que te veas y te sientas rejuvenecida con una técnica que proporciona vitalidad.
Cómo lograr el maquillaje antiaging
Para lograr un maquillaje antiaging perfecto es esencial aplicar la base con esponja. Esta base debe ser medio tono más claro que el tono de la piel del cutis. Se recomienda que el subtono corresponda a un rosado muy ligero, para garantizar un efecto más fresco.
La clave en este tipo de maquillaje es evitar recargar el rostro. Cualquier producto en exceso puede influir en mostrar una imagen envejecida o cansada. El maquillaje antiaging tiene la función de refrescar y de proveer vitalidad al rostro.
Cómo puedes aplicar el corrector
Hay dos elementos esenciales del corrector en el maquillaje antiaging. Primero, tiene que ser de textura fluida y, segundo, al igual que la base de maquillaje, debe tener un tono más claro que la piel del rostro. La forma de aplicarlo es, desde la mitad interior de las ojeras hacía el lagrimal.
La importancia del eyeliner
Aunque el paso del tiempo puede dificultar la aplicación del eyeliner de manera efectiva, es importante que forme parte del maquillaje. En estos casos, siempre se recomienda el uso de delineadores líquidos y que tengan punta fina.
¿Qué polvos usar?
Los polvos traslúcidos que aporten un efecto luminoso, son los únicos recomendados en el maquillaje antiaging. Su aplicación se hace únicamente en la parte superior del puente de la nariz, barbilla y centro de la frente.
No es recomendable aplicarlo en el resto del rostro, porque puede marcar las líneas de expresión y darle un aspecto más pronunciado.
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