Ya sea estudiando, trabajando o en un cita pasamos horas y horas en la calle; lo malo de esto es que siempre llega el momento en que nuestro maquillaje ya no luce igual de impactante como cuando salimos de la casa.
Para solventar esto solemos tomar unos minutos y retocarnos el maquillaje; pero, ¿no te ha pasado que no te queda igual de fantástico? o ¡¿qué, en ocasiones, hasta nos queda peor que antes de irnos a retocar?!
Por mucho que nuestro maquillaje aguante, el retocarnos es una acción casi imposible de evitar, por lo hoy te traigo unos consejos para que te puedas arreglar el maquillaje y no frustrarte en el intento:
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Usa toallitas húmedas y/o una crema hidratante:
Si tienes la piel grasa usa una toallita húmeda para retirar el exceso de grasa y así tu piel no se vea con tanto brillo. En caso de ser piel seca lleva tu cremita humectante y verás cómo tu piel recupera su color
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Retira el labial:
Para evitar que se cuartee el labial o que queden zona con manchas lo mejor es que, al momento de retocar, lo retires y lo apliques de nuevo.
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Aplica de nuevo y por encima:
Para que nuestros ojos sigan siendo el centro de atención, aplica el eyeliner nuevamente para dar más intensad y aplica por encima un poco de sombra.
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Otorga más luminosidad a tu rostro:
Los polvos lo puedes aplicar por encima sin problemas, sólo ten cuidado de no aplicar muchas capas para que no se te vea con mucha máscara.
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No olvides el colorete:
La vida es color; así que aplica el colorete; ya con las horas seguro de desvaneció.
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Oculta imperfecciones:
No dejes que las ojeras o esos pequeños granitos vean la luz, usa de nuevo tu corrector.
Así que no olvides salir de tu casa con los productos que vas a necesitar en el transcurso del día (o noche) para retocar el maquillaje.